jueves, 20 de diciembre de 2007

La guitarra del joven soldado


Tengo 10 minutos para escribir esta entrada, no puedo dedicarle más. Pero, ¿qué más da?, el pedido de libros me hace sentir que estoy haciendo algo productivo, es por eso que tengo que seguir con esta apariencia de becaria compuesta, cuando hace días, en el fondo, sólo vienen caminando ganas locas de escribir, y el mundo literario me subyuga (estoy bajo el efecto Vargas Llosa, lo siento, mal momento para cumplir años y leerlo, aunque tengo un talismán humano, my Nach, que me ayuda a superar estos accesos del romanticismo a lo Byron).

El miércoles, cuando no haya vuelto a casa por Navidad, me darán el resultado del concurso de relato breve. Puse en el sobre de los datos "verdaderos" mis dos apellidos. Espero poder convencerlos con mi DNI donde sólo aparece uno, si es que gano. A todo esto, ¿no?... en el fondo, sigo teniendo unas aspiraciones de literata brillante que mi estadía en Pamplona ha sabido reubicar con más de una bofetada de humildad. Si no gana, ganará la humanidad.

Ayer recibí una parte del regalo de Nach y el conjunto de Octavia y Luigi: UNA GUITARRA
..."me hizo una ilusión" (siguiendo el comentario de mi director sobre la pérdida de mi argentinidad lingüística)

Nombre completo: Casiopea Uxue
(Es su mejor fusil)

1 comentario:

Anónimo dijo...

CASIOPEA CASIOPEA.. DE DONDE ME SUENA?
Y.. LA GUITARRA ORIGINAL NO LA POSTAL QUEREMOS CONOCER!

BESOS!!