Y en este embrollo, acabo de ver que inventaron una nueva palabra en castellano para este acto de hacer una entrada: postear. A su vez, me doy cuenta de que una puede ser neutra o no neutra en un blog.
Lo que hace a este viernes especial es que por fin llegó el verano o la primavera a la ciudad. Pamplona amaneció con ese aire cálido y cargadito que se satura en los primeros días de julio, cuando arrasa el asfalto, al son de los sanfermines. Entró esta mañana por el ventanal de nuestro living -que dejamos abierto a la noche- e impregnó la casa de olor a sol.
Hace dos días estamos conmovidos por el cese del alto al fuego de nuestro terrorismo local. Los políticos se pelean Navarra como un pedazo de torta. En medio de esta torta, los que vivimos acá; pero la noticia no afectó ni un poco el humor de la gente: en el fondo, con alto o sin alto, se sigue pidiendo la paz.
Vuelvo a mi trabajo! Me espera Lukács y su teoría de la novela histórica y no me va a perdonar que me cuelgue en el blog escribiendo filosofadas. Hoy a la nochecita sale birra con amigas venezolanas en algún bar del barrio de estudiantes....esto es lo que flipa del verano!!! Mañana, cena en casa con amigos. El ventanal queda abierto hasta la próxima lluvia.
La foto movida, una que le saqué a Nacho desde la ventanilla del bus, antes de partir para Barcelona hace un mes. La cuelgo porque me muero de amor...y porque ser mujer de fotógrafo hace que este ejemplar sea un milagro.
Para quienes no entiendan el título, Sabina me persigue.
Lo que hace a este viernes especial es que por fin llegó el verano o la primavera a la ciudad. Pamplona amaneció con ese aire cálido y cargadito que se satura en los primeros días de julio, cuando arrasa el asfalto, al son de los sanfermines. Entró esta mañana por el ventanal de nuestro living -que dejamos abierto a la noche- e impregnó la casa de olor a sol.
Hace dos días estamos conmovidos por el cese del alto al fuego de nuestro terrorismo local. Los políticos se pelean Navarra como un pedazo de torta. En medio de esta torta, los que vivimos acá; pero la noticia no afectó ni un poco el humor de la gente: en el fondo, con alto o sin alto, se sigue pidiendo la paz.
Vuelvo a mi trabajo! Me espera Lukács y su teoría de la novela histórica y no me va a perdonar que me cuelgue en el blog escribiendo filosofadas. Hoy a la nochecita sale birra con amigas venezolanas en algún bar del barrio de estudiantes....esto es lo que flipa del verano!!! Mañana, cena en casa con amigos. El ventanal queda abierto hasta la próxima lluvia.
La foto movida, una que le saqué a Nacho desde la ventanilla del bus, antes de partir para Barcelona hace un mes. La cuelgo porque me muero de amor...y porque ser mujer de fotógrafo hace que este ejemplar sea un milagro.
Para quienes no entiendan el título, Sabina me persigue.
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